Después de 8 años Ecuador volvió al Mundial de Fútbol y buscábamos un ícono para apoyar a la selección. No queríamos un ícono más, necesitábamos algo que nos pusiera la piel de gallina. Gracias al Instituto Geofísico y a nuestro cliente Marathon Sporats, detectamos un sismo de 6,7 en la escala de Richter, provocado por la vibración del aliento de la hinchada.